La detección del primer caso de hepatitis infantil aguda de origen desconocido en Argentina, el pasado 4 de mayo, representa un toque de alerta para padres y pediatras. La recomendación es la consulta ante signos de alarma.
Si bien hasta la fecha siguen las investigaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre el brote de hepatitis infantil aguda de origen desconocido en varios países del mundo, entre ellos Argentina, desde el Ministerio de Salud Pública manifestaron que en Paraguay no se registraron casos sospechosos.
Se trata de “una hepatitis absolutamente nueva, no es de las convencionales”, explicó el Dr. Ricardo Iramain Chilavert, titular de la cátedra de Pediatría de la Universidad Nacional de Asunción (UNA). Comentó que de los más de 230 casos en el mundo, la evidencia científica da cuenta de que se encontró al adenovirus.
“Hay 50 tipos de virus. El virus que se está aislando actualmente es el virus 41. Esto nació en abril pasado en el Reino Unido, específicamente en Escocia, cuando fueron identificados cinco niños con insuficiencia hepática, una falla del hígado muy importante”, explicó.
El profesional agregó que, teniendo en cuenta que el adenovirus usualmente ocasiona problemas respiratorios como tos, catarro, chorrera de nariz, fiebre y síntomas gastrointestinales, entre ellos náuseas, vómito, dolor abdominal y diarrea, la recomendación es la consulta precoz.
Otros signos de atención para padres y pediatras, según Iramain, son la fiebre, fatiga, pérdida de apetito y enrojecimiento de los ojos, porque el virus genera la conjuntivitis. Asimismo, puede producir dolores de las articulaciones, ictericia (coloración amarillenta de la piel y mucosas), orina de color muy oscuro y deposiciones de color blanquecino.
Medidas preventivas
Pese a que todavía no existe registro de la enfermedad en el país, la recomendación, en caso de niños con síntomas respiratorios, es el uso de tapaboca, el lavado frecuente de manos, no asistir a la escuela y la consulta médica.
Iramain manifestó que el adenovirus es muy contagioso y se detecta en menores de 10 años y, específicamente en niños de 5 años par abajo.
Un rasgo peculiar con los infectados con la nueva hepatitis es que no estaban vacunados contra el covid-19, por lo que se recomienda a los padres que lleven a inmunizar a los niños que estén en el rango de edad definido por el Ministerio de Salud.
Fuente. Abc Color