Pedro Alliana había anunciado que esta semana mantendrán reuniones con gobernadores para explicar cómo harán la distribución de los recursos para sobrellevar el último tramo de campaña.
La Asociación Nacional Republicana (ANR) pone en marcha su plan B y apuesta a los fondos que debe recibir del Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE), lo que se le adeuda en concepto de aporte estatal y subsidio electoral, por anteriores elecciones, para financiar la última etapa de la campaña electoral.
Faltando tres semanas para las elecciones, sigue la agrupación sin poder acceder a los recursos que precisa para cubrir los gastos que demandará lo que resta de la campaña y el del día D.
La idea de conseguir un crédito se va diluyendo ante la negativa de los bancos y financieras, por el temor que sobrevuela en el sector financiero por las sanciones económicas impuestas por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos contra Horacio Cartes, titular de la ANR.
El diputado y candidato a vicepresidente por la ANR, Pedro Alliana, había señalado que tras concluir la Semana Santa iniciarán el proceso de entrega de los recursos a la dirigencia de base colorada, que está inquieta ante la proximidad de las elecciones.
El Partido Colorado apuesta al voto duro para cerrar filas en torno a la dupla presidencial. Los presidentes de seccionales y la dirigencia de base necesitan recursos para movilizar la estructura el próximo 30.
Alliana anunció que entre hoy y mañana estarían manteniendo reuniones con los gobernadores y sus respectivos administradores para explicar cómo estarán realizando la distribución de los recursos.
FONDO ESTATAL. La Justicia Electoral proyectó para este año electoral la suma de G. 58.000 millones en concepto de aporte estatal y subsidio electoral que deben ser distribuidos a los partidos.
Las autoridades del organismo electoral habían anunciado que en febrero de este año ya cancelaron el pago del subsidio correspondiente a las elecciones generales realizadas en el 2018.
En concepto de aporte estatal, que se abona a los partidos por la cantidad de votos obtenidos para el Congreso, suma para este año G. 28.132 millones. Mientras que en subsidio electoral, que otorga el Estado luego de cada elección de acuerdo con los gastos que originen las actividades de cada campaña, alcanza G. 26.824 millones. La transferencia de los fondos depende de la disponibilidad presupuestaria del Ministerio de Hacienda.
Tanto Alliana como el candidato presidencial Santiago Peña señalan que la ANR no tiene problema de recursos para las elecciones. Sin embargo, varios referentes siguen hablando de la necesidad de los préstamos.
Ante la no obtención de créditos, apuntan a la disponibilidad de fondos que provendrán de los aportes. Otro plan apunta a la emisión de bonos para llegar al día D.
TRAZABILIDAD. Las movidas que está realizando la ANR principalmente para el día de las elecciones están siendo monitoreadas luego de la sanción financiera a Cartes. Desde el sector oficialista advirtieron que para evitar caer en el radar de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC), las autoridades partidarias deben cuidar los detalles y demostrar la trazabilidad del dinero. Hablaron de pedir a los bancos un crédito de G. 37.000 millones, pero hasta ahora no se consigue.
Uno de los críticos es el diputado oficialista Hugo Ramírez, quien hizo referencia a los efectos que está generando la sanción a Cartes y las trabas para conseguir los préstamos para sobrellevar la campaña.
“La estrategia del cartismo es debilitar a los sectores del partido que no se arrodillan al patrón; por eso estamos sin crédito de campaña y ahora plantean la emisión de bonos. Qué caro nos salió el outsider”, cuestionó el diputado.
En el oficialismo se preguntan de dónde se sacará la plata, y si los fondos provienen de Cartes cómo harán para justificar la trazabilidad.
La cifra
- 58.000 millones es lo proyectado por la Justicia Electoral para el pago del subsidio electoral y aporte estatal.
Fuente. Última Hora