itcoin cumplió apenas 13 años el 31 de octubre. Fue en 2008 cuando un tal Satoshi Nakamoto (cuya identidad aún nadie conoce) envió a un grupo de criptógrafos un proyecto con el cual quería crear un nuevo sistema de intercambio de valor.
En este documento de unas nueve páginas, que hoy conocemos como whitePaper, Nakamoto explicaba cómo se podía crear el primer dinero que no necesitaría de los bancos.
¿Y por qué crear un sistema independiente del sistema bancario? Pues Nakamoto consideraba que las entidades financieras no estaban manejando bien nuestro dinero.
Una muestra de esta mala gestión fue la popular crisis Subprime de 2009, cuando explotó la burbuja inmobiliaria alentada por muchos bancos en Estados Unidos y que se tradujo en el quiebre de muchos de ellos y en pérdidas extraordinarias de dinero para todo el mundo.
La promesa de Bitcoin es ofrecer un sistema 100% digital, verdaderamente global, donde tú eres dueño absoluto de tu dinero y puedes hacer transacciones de valor directamente con otra persona (P2P), sin necesidad de un banco.
Con Bitcoin puedes enviar cualquier monto de dinero de un país a otro, con comisiones infinitamente menores que las de un banco y en menos de 15 minutos. Y todos estos movimientos quedan registrados en un gran libro contable histórico que es público.
La descentralización es poder
Una de las grandes fortalezas de Bitcoin también radica en la descentralización. Un concepto que se empezó a usar gracias a un avance tecnológico que también se puso a prueba por primera vez con esta criptomoneda: La blockchain.
La blockchain o “Cadena de bloques” (por su traducción al español) es la combinación de una serie de herramientas que permite almacenar información en una red gigantesca de computadores interconectados entre sí.
Estos computadores son los sustitutos de los bancos en Bitcoin. Miles de ellos guardan una copia idéntica del mismo registro contable de toda la red. Por eso la información no está concentrada en unas pocas manos, sino repartida en todos lados.
También son quienes registran todas las transacciones que ocurren con Bitcoin de forma seudónima (se sustituyen nombres por códigos criptográficos), validan saldos de sus usuarios y autorizan la creación de nuevas unidades de Bitcoin.
Este funcionamiento hace que hoy la blockchain sea universal, distribuida, transparente, inmutable, seudónima y muy segura. Una verdadera joya de la tecnología que ya se está usando para muchas cosas, más allá de Bitcoin.
El activo digital más valioso
Esta y otras razones han puesto a Bitcoin en la mirada de millones en el mundo. La comprensión de su valor ha disparado el interés y, por tanto, la demanda de este activo 100% digital año tras año.
Bitcoin ha pasado de valer escasos centavos cuando era un bebé a cotizarse de adolescente sobre los 62.000 dólares (al momento de escribir esta nota).
Solo en los últimos tres años, Bitcoin ha multiplicado hasta casi 7 veces su precio. Un crecimiento único para cualquier activo de inversión a largo plazo.
Hoy Bitcoin posee una capitalización de mercado (cantidad de dinero que mueve) sobre 1 billón 180 mil dólares, lo que lo ubica en el primer lugar de las criptomonedas más valiosas.
Si Bitcoin fuese una empresa, hoy valdría mucho más que empresas globales como Netflix, Verizon, PayPal, Coca Cola o Bank of America.
¡Y todo esto con apenas 13 años!
Definitivamente se las trae este adolescente. ¿Qué será de él cuando ya sea todo un adulto?
Fuente. eldiario.com