La senadora Esperanza Martínez espera que la indignación ciudadana genere un efecto en los parlamentarios oficialistas que abogan por un aumento salarial de G. 5 millones. Resaltó que aún hay tiempo para frenar las autoasignaciones privilegiadas.
Ante el dictamen de la Comisión de Hacienda y Presupuesto que salió a favor del autoaumento de G. 5 millones para los legisladores, la senadora opositora Esperanza Martínez aclaró que su postura en contra de estos privilegios “es histórica”.
Recordó que desde la bancada del Frente Guasu apoyaron sacar todos los beneficios (seguro médico vip y vales de combustible) durante la pandemia del Covid-19, que enlutó a miles de familias paraguayas y que evidenció los problemas de inversión en el sector salud.
Los G. 5 millones para cada legislador serían divididos en los rubros de dieta y gastos de representación, es decir, pasarían a ser permanentes.
Esta autoasignación será aprobada en la sesión extraordinaria de este jueves, donde el pleno deberá estudiar el proyecto de ley del Presupuesto General de la Nación (PGN) 2025.
Justamente, esa movida se hace para evitar violar la ley Godoy –Ley N° 6622/2020– “que establece medidas de racionalización del gasto público”, que no permite que los parlamentarios y ministros ganen más que el presidente de la República (G. 37.908.800).
Si bien el cartismo tiene los números para aceptar este privilegio frente a hospitales con estructuras precarias y falta de insumos y medicamentos, Martínez mostró esperanzas hacia la presión que puede ejercer la ciudadanía, por lo que espera que el aumentazo no se concrete.
“Yo creo que la indignación de la gente está creciendo, sobre todo entre los médicos. Espero que la presión ciudadana también tenga un efecto sobre los colegas, hasta mañana tenemos tiempo”, reflexionó.
El dictamen a favor salió pese a las falsas promesas del líder de la bancada de Honor Colorado, Natalicio Chase, así como del titular del Congreso, Bachi Núñez, quienes mostraron una postura en contra de los privilegios.
En la actualidad, los parlamentarios reciben un salario de G. 32.774.840 y si se aprueba el aumento de G. 5 millones, pasarían a ganar G. 37.774.840 al mes.
Fuente. UH